E sido victima del ruido otra vez. No puedo concebir el silencio de mi alma, necesito respirar el ruido ajeno para calmar mi ansia y temor.

Solo deseo poner a disposición mi autoestima, una vez más, a ver si esta vez comprendes que al final mi vaso esta vacio.

Quizás mi vacío corazón se contagio, el futuro me atrapo. Es un bodrio, un asco, una mierda lo que sucede, lo que pasa y pasara.

Y...¿Ahora que pasa?

El tabaco sustenta mi tumba y me permite tolerar un mundo insoportable... Lleno de recuerdos vacíos y deseos negados.

Aunque pierda el control de mi ser, que quede claro que mis frases siempre serán perturbadas por la ignorancia ajena, por los odios sordos que no desean entender. Nuestras palabras carecen de sentido y de sustento... son recuerdos absurdos cuando se trata de no perder los cabales, de no morir aplastado por el peso del remordimiento.

No lo intentes, por favor...solo no lo intentes. Una vez me dijiste que al otro lado del rió había un paraíso, pero ahora solo busco una banca para morir sin estorbar. Maldita perra, me niegas tú mano.

Solo quiero escupir en tu santo altar, pero sé, con patética certeza, que luego lameré tus pies para pedir perdón.

No hay futuro en los brazos de la oscura magdalena.