2/8/09

Yo no quiero sonar amargo, frío o cruel. Pero lo soy. Y así es como sale.

El escenario de brilla con la luz de los reflectores. La gente aplaude esperando al "pequeño poeta oscuro", aquel que lanza una puteada por cada palabra que dice, aquel humanista cínico que viste de negro.
Aplausos, gritos de alabanzas, todo esto mientras enciende el primer cigarrillo de la segunda cajetilla. Entonces, frente a un auditorio lleno deja escapar la frase inicial.

"Perdí mis lentes de contacto ¿Me pueden ayudar a buscarlos?"